La demanda mundial de carbón crecerá menos pero seguirá dañando el planeta
La demanda mundial de carbón crecerá menos en los próximos años gracias a los esfuerzos de China para buscar energías limpias, aunque su consumo seguirá dañando seriamente el medio ambiente, advirtió este lunes la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
En su informe anual sobre esta energía fósil, la que más gases de efecto invernadero genera, la agencia energética de los países desarrollados prevé un crecimiento anual de la demanda mundial del 2,3% hasta 2018, frente al 2,6% de su anterior previsión.
"A pesar de un ritmo de crecimiento ligeramente más lento, el carbón tendrá cada vez un papel más importante que el petróleo y el gas en el crecimiento de la demanda mundial de energía, una tendencia que se observa desde hace una década", explica la AIE.
Entre 2007 y 2012, la demanda mundial de carbón aumentó un 3,4% anual, la tasa más alta entre las energías fósiles. "Más de tres quintas partes del aumento de las emisiones mundiales de CO2 desde el año 2000 provienen de la combustión de carbón para producir electricidad y calor", recuerda la agencia.
En 2012 se consumieron en el mundo cerca de 7.700 millones de toneladas de carbón, 170 millones de toneladas más que el año anterior.
La demanda de carbón "en su forma actual es simplemente insostenible" para el medio ambiente, dijo la directora de la AIE, Maria van der Hoeven, y recordó que el éxito del carbón se debe a que es un recurso "abundante y geopolíticamente seguro, con centrales eléctricas de carbón que se pueden integrar fácilmente en sistemas energéticos existentes".
Inflexión de la demanda en Europa
Hasta 2018, "la mayor parte del aumento [de la demanda] provendrá de China, como en los últimos diez años", prevé la AIE. Sólo en 2012, el consumo de carbón en China representó el 47,8% del consumo mundial, un nuevo récord.
La agencia también destaca que las políticas para frenar el consumo en China, primer consumidor mundial de carbón desde 1984, "ya están afectando al mercado mundial" de esta energía fósil altamente contaminante.
Prueba de ello es que el crecimiento del consumo de carbón pasó del +9,4% en 2011 al +4,7% en 2012 y alcanzó 3.680 millones de toneladas.
"Aunque China será responsable del 60% del aumento de la demanda en el mundo en los próximos cinco años, los esfuerzos del gobierno para favorecer la eficiencia energética y diversificar la producción de electricidad tendrán efectos, frenando el aumento de la demanda", estimó la agencia de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
La AIE recuerda, sin embargo, que Pekín ha aprobado varios proyectos de fábricas de transformación de carbón en gas o en diésel sintético ('coal-to-gas' y 'coal-to-liquids'). Estas instalaciones, que podrían reducir la contaminación en las ciudades chinas, favorecen sin embargo la demanda de carbón y suponen importantes emisiones de CO2, así como el aumento del consumo de agua.
Sólo en 2012, China consumió la misma cantidad de carbón que Alemania desde 1990, que la Unión Europea desde 2006 o que Estados Unidos desde 2009.
Según las previsiones de la AIE, Japón aumentará su consumo de carbón un 1,3% de media por año hasta 2018.
En Europa, el consumo en los países de la OCDE debería bajar un 6% en los próximos cinco años, a pesar de el repunte de 2012-2013 provocado por la caída de precios frente al gas.
Este aumento en Europa "sólo es temporal", según la AIE, que prevé una nueva caída de la demanda provocada por el débil crecimiento económico, el aumento de las energías renovables y la mayor eficacia de las centrales de carbón.
En Estados Unidos, el consumo cayó en 2012 un 10,7%, la segunda bajada anual más importante registrada por la AIE, principalmente por la competencia del gas de esquisto, más barato. La demanda en el país debería mantenerse estable hasta 2018.
Fuente: http://es.finance.yahoo.com/
En su informe anual sobre esta energía fósil, la que más gases de efecto invernadero genera, la agencia energética de los países desarrollados prevé un crecimiento anual de la demanda mundial del 2,3% hasta 2018, frente al 2,6% de su anterior previsión.
"A pesar de un ritmo de crecimiento ligeramente más lento, el carbón tendrá cada vez un papel más importante que el petróleo y el gas en el crecimiento de la demanda mundial de energía, una tendencia que se observa desde hace una década", explica la AIE.
Entre 2007 y 2012, la demanda mundial de carbón aumentó un 3,4% anual, la tasa más alta entre las energías fósiles. "Más de tres quintas partes del aumento de las emisiones mundiales de CO2 desde el año 2000 provienen de la combustión de carbón para producir electricidad y calor", recuerda la agencia.
En 2012 se consumieron en el mundo cerca de 7.700 millones de toneladas de carbón, 170 millones de toneladas más que el año anterior.
La demanda de carbón "en su forma actual es simplemente insostenible" para el medio ambiente, dijo la directora de la AIE, Maria van der Hoeven, y recordó que el éxito del carbón se debe a que es un recurso "abundante y geopolíticamente seguro, con centrales eléctricas de carbón que se pueden integrar fácilmente en sistemas energéticos existentes".
Inflexión de la demanda en Europa
Hasta 2018, "la mayor parte del aumento [de la demanda] provendrá de China, como en los últimos diez años", prevé la AIE. Sólo en 2012, el consumo de carbón en China representó el 47,8% del consumo mundial, un nuevo récord.
La agencia también destaca que las políticas para frenar el consumo en China, primer consumidor mundial de carbón desde 1984, "ya están afectando al mercado mundial" de esta energía fósil altamente contaminante.
Prueba de ello es que el crecimiento del consumo de carbón pasó del +9,4% en 2011 al +4,7% en 2012 y alcanzó 3.680 millones de toneladas.
"Aunque China será responsable del 60% del aumento de la demanda en el mundo en los próximos cinco años, los esfuerzos del gobierno para favorecer la eficiencia energética y diversificar la producción de electricidad tendrán efectos, frenando el aumento de la demanda", estimó la agencia de la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE).
La AIE recuerda, sin embargo, que Pekín ha aprobado varios proyectos de fábricas de transformación de carbón en gas o en diésel sintético ('coal-to-gas' y 'coal-to-liquids'). Estas instalaciones, que podrían reducir la contaminación en las ciudades chinas, favorecen sin embargo la demanda de carbón y suponen importantes emisiones de CO2, así como el aumento del consumo de agua.
Sólo en 2012, China consumió la misma cantidad de carbón que Alemania desde 1990, que la Unión Europea desde 2006 o que Estados Unidos desde 2009.
Según las previsiones de la AIE, Japón aumentará su consumo de carbón un 1,3% de media por año hasta 2018.
En Europa, el consumo en los países de la OCDE debería bajar un 6% en los próximos cinco años, a pesar de el repunte de 2012-2013 provocado por la caída de precios frente al gas.
Este aumento en Europa "sólo es temporal", según la AIE, que prevé una nueva caída de la demanda provocada por el débil crecimiento económico, el aumento de las energías renovables y la mayor eficacia de las centrales de carbón.
En Estados Unidos, el consumo cayó en 2012 un 10,7%, la segunda bajada anual más importante registrada por la AIE, principalmente por la competencia del gas de esquisto, más barato. La demanda en el país debería mantenerse estable hasta 2018.
Fuente: http://es.finance.yahoo.com/
La demanda mundial de carbón crecerá menos pero seguirá dañando el planeta
Reviewed by luis
on
12/17/2013
Rating: