Arabia Saudí pierde la batalla del petróleo: el crudo barato ha resucitado al fracking de EEUU

La producción de esquisto superará los 170.000 barriles dia en 2017

La Agencia Internacional de la Energía (AIE) estima que la producción de petróleo esquisto de Estados Unidos superará los 170.000 barriles diarios en 2017, gracias a que el sector es "mucho más ágil y eficiente" tras el desplome del precio del crudo.

El ritmo de apertura de nuevas perforaciones se sitúa en niveles de abril de 2014, cuando el petróleo cotizaba por encima de los 100 dólares el barril.

Arabia Saudí desató en 2014 una guerra de precios en el petróleo con el objetivo de sacar a los productores más caros del mercado, especialmente ante el aumento de producción de esquisto procedente del fracking en Estados Unidos.

Tres años después, con un acuerdo histórico en la OPEP para estabilizar los precios tras desplomarse hasta los 30 dólares el barril, se puede decir que Arabia Saudí ha perdido la batalla.

Según la AIE en su último informe, el repunte de precios del crudo de los últimos seis meses ha permitido que Estados Unidos eleve el número de perforaciones de fracking a un ritmo similar al que se vivía en abril de 2014, cuando el precio del petróleo cotizaba alrededor de los 100 dólares.

"Los informes recientes indican que la producción de shale oil está creciendo a pasos agigantados y no sólo por las nuevas plataformas abiertas, no hay duda que la industria de fracking ha resurgido con fuerza desde un mundo con el petróleo a 30 dólares siendo más ágil y eficiente, tanto en la apertura de nuevos pozos como en un aumento de producción por yacimiento".

La AIE estima que la producción de Estados Unidos en esquisto superará los 170.000 barriles al día frente al descenso acumulado de 300.000 barriles en 2016. La previsión del conjunto de producción de petróleo para el país es de 12,8 millones de barriles diarios, 320.000 más que en 2016.

El organismo dependiente de la OCDE indica que "ante la perspectiva de un aumento de los precios, está ofreciendo un estímulo para los productores no OPEP que tiene un coste más elevado".

También espera que países como Brasil y Canadá aporten a la oferta mundial 415.000 barriles diarios más en 2017 con proyectos de largo plazo que se van a materializar ahora.

En China y Colombia, se reducirán las fuertes caídas en la producción observados en 2016.

Para los países que no pertenecen a la OPEP en su conjunto, el crecimiento de la producción neta será de 380.000 barriles día, teniendo en cuenta los acuerdos de limitación de producción, gracias a los aumentos de Libia y Nigeria, que quedaron fuera del pacto.

Mayor demanda que oferta
A pesar de unas perspectivas para estos países de aumento de producción, la AIE estima que este año el mercado absorberá 97,8 millones de euros, 100.000 más de los que preveían hace un mes.

En diciembre de 2016 la producción mundial se redujo en más de 600.000 barriles diarios para quedarse en 97,6 millones de barriles diarios.

Las primeras indicaciones de este comienzo de 2017 apuntan a que ese descenso sigue porque Arabia Saudí (10,48 millones de barriles diarios en diciembre, tras 10,64 en noviembre) y sus vecinos están reforzando sus recortes.

Por lo que se refiere a la demanda, en los tres últimos meses del pasado año se elevó a 97,3 millones de barriles diarios, 300.000 barriles más de lo que se había estimado hace sólo un mes, por un tirón del consumo en Europa, Rusia y Asia. Para 2017, la AIE estima que la demanda retroceda 1,3 millones de barriles.

Sobre los precios, la institución cree que habrá una estabilización de los precios, en un nivel que interese a Arabia Saudí y que no suponga una ventaja para los productores de alto coste de producción.

Aunque reconoce que es demasiado pronto para pronunciarse sobre el nivel de cumplimiento del acuerdo de la OPEP y de otros once países productores y sus consecuencias.

Fuente: Periodista Digital