Los muros de Trump @DoubleplusUT #Especial
Trump construye muros y destruye el comercio. El muro mexicano ejemplifica el despropósito con el que promete “salvar” a EE.UU. Cree que no, pero lo pagará de maneras que su arrogancia no sospecha. Así, su éxito será su desgracia. Se trata del fracasado “sálvese quien pueda” proteccionista. Ver cinco minutos a Trump basta para advertir que la brutalidad se impone a nivel global; es el destino adonde nos trajo el ascenso de la insignificancia y la indigencia mental de las ideologías dominantes, luego de haber reducido la política a mercadeo, encuestas y manipulación.
¿Nadie le habló a Trump de 1929? Entonces el proteccionismo en pocos años redujo el comercio mundial a 1/3. Suponga que impone su cóctel completo: aranceles, subvenciones y prohibición de importaciones. A corto plazo, aumentará el empleo, el gasto y la deuda, el efecto contagio disminuirá las exportaciones y la oferta de bienes importados para el consumidor norteamericano; luego las economías cruzadas y el mayor costo laboral y de insumos hará que empresas, PIB y empleo caigan y suba la inflación. Más allá, la falta de intercambio internacional castigará la tasa de innovación y la industria acumulará desventajas tecnológicas. Otros países ocuparán los mercados que ahora los norteamericanos que encabeza este “líder” desprecian. Trump, la autarquía y los EE.UU habrán fracasado.
Trump olvida que la racionalidad capitalista necesita la ampliación incesante del capital o muere. Como todo populista, Trump, cual Chávez gringo, basa su éxito a corto plazo en falacias y arrasando con los recursos creados por el mundo que quiere destruir. Pero, cuando colapsen, los norteamericanos verán el engaño; deben detenerlo y ojalá no demasiado tarde, cuando el desenlace trágico sea inevitable. Para los populistas el largo plazo no existe y por eso, al final, fracasan, pero lo increíble es que siempre consigan quien les crea. El miedo y el odio funcionan, pero, escríbalo, siempre para aumentar los males que prometen resolver.
Miguel Aponte
Profesor en la Universidad Central de Venezuela
@DoubleplusUT
En la Web:
¿Nadie le habló a Trump de 1929? Entonces el proteccionismo en pocos años redujo el comercio mundial a 1/3. Suponga que impone su cóctel completo: aranceles, subvenciones y prohibición de importaciones. A corto plazo, aumentará el empleo, el gasto y la deuda, el efecto contagio disminuirá las exportaciones y la oferta de bienes importados para el consumidor norteamericano; luego las economías cruzadas y el mayor costo laboral y de insumos hará que empresas, PIB y empleo caigan y suba la inflación. Más allá, la falta de intercambio internacional castigará la tasa de innovación y la industria acumulará desventajas tecnológicas. Otros países ocuparán los mercados que ahora los norteamericanos que encabeza este “líder” desprecian. Trump, la autarquía y los EE.UU habrán fracasado.
Trump olvida que la racionalidad capitalista necesita la ampliación incesante del capital o muere. Como todo populista, Trump, cual Chávez gringo, basa su éxito a corto plazo en falacias y arrasando con los recursos creados por el mundo que quiere destruir. Pero, cuando colapsen, los norteamericanos verán el engaño; deben detenerlo y ojalá no demasiado tarde, cuando el desenlace trágico sea inevitable. Para los populistas el largo plazo no existe y por eso, al final, fracasan, pero lo increíble es que siempre consigan quien les crea. El miedo y el odio funcionan, pero, escríbalo, siempre para aumentar los males que prometen resolver.
Profesor en la Universidad Central de Venezuela
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Reviewed by Anónimo
on
2/05/2017
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